He llorado por quien
no debía y he reído con falsas amistades. He tropezado dos veces con la misma
piedra. He perdonado mucho, he callado mucho, he callado te quieros por miedo o
por inseguridad. Ha habido veces que me he despertado con ganas de comerme el
mundo y otras creía que el mundo se me comía a mí. He gritado con fuerza, pero
mi voz no siempre salía. He abrazado a la persona que pensé que nunca me haría daño y me he dado cuenta de que no se merecía ni el roce de mi piel. He tenido
la sensación de volar más alto que las nubes. Ha habido días en los que me
sentía preciosa y otros en los que no podía ni mirarme al espejo. He
descubierto que el paraíso puede encontrarse en el tacto de la piel, que las
caricias son más fuertes que los golpes y que los besos pueden hacerte volar. Y
el secreto, el verdadero secreto está en
NO ARREPENTIRSE.